Esperando a la carne
Estabilidad generalizada en toda Europa durante este mes de abril. Las únicas excepciones han sido Dinamarca e Italia, que han bajado. En el primer caso, porque es un país muy sensible a la exportación a terceros países y esta ha seguido sin aportar impulsos. En el segundo caso, porque un foco de PPA en la estratégica zona porcina de Parma ha enturbiado su mercado interior por temor a cierres en la exportación de jamones. Así que los daneses han bajado el cerdo para intentar ser más competitivos y los italianos han
tenido muchos problemas para fijar cotizaciones del cerdo pero, cuando lo han hecho, ha sido con un descenso relevante. Pero, en el global de la UE, el comentario generalizado durante este mes de abril ha sido el de equilibrio entre oferta y demanda: los retrasos de matanza por los festivos de Pascua han dejado este mes una oferta de cerdos suficiente como para permitir un suministro cómodo a los mataderos. Más aún porque el mercado de la carne ha estado muy parado, a causa de la fría y lluviosa climatología en el norte de Europa, y tampoco ha incentivado que se quisiera matar más.
