Cada país, un mundo
El mes de mayo ha tenido movimientos de las cotizaciones del cerdo para todos los gustos en la UE. En España, la referencia no se ha movido lo más mínimo. Los mataderos han empezado a presionar para conseguir alguna cesión, en base a la pérdida de margen que sufren por un cerdo caro y una carne de cerdo estancada. Pero lo limitado de la oferta de cerdos ha mantenido firme la cotización: en el primer trimestre de 2023, la matanza en España ha bajado un -9% respecto al mismo período de 2022, falta de cerdos para sacrificar más. Pero esta realidad tampoco ha conseguido llevar más arriba el cerdo, ya que la cotización española sale de mayo como la más alta de la UE y la carne no consigue llegar a su altura.