Un verano diferente
Cambio de tercio en el mercado europeo que, de forma casi inédita, ha empezado el verano bajando el precio del cerdo, cuando lo normal es que, ante el descenso estacional de su oferta, la cotizaciones suban o, como mínimo se estabilicen. Pero, de la misma manera que la primavera fue atípica por la demanda récord de China, el verano también va a serlo por la misma razón pero invertida: la fulminante retirada de la demanda de China. El precio del cerdo en China ha caído casi un -16% durante el mes de junio y acumula ya una pérdida del 60% en lo que se lleva de año. El diferencial respecto al precio español se ha reducido a un porcentaje pocas veces visto y que quita cualquier atisbo de competitividad a los exportadores españoles: se ha pasado de un diferencial teórico del 300% en noviembre del año pasado a apenas un 30% ahora. La cabaña china de cerdos al cierre del primer trimestre ha resultado un +30% superior a hace un año y se sitúa claramente por encima de los años de la PPA (2019-2020) y a un nivel similar a 2017. La inercia estacional (disminución progresiva de la oferta, bajada de los pesos), junto con una demanda sostenida pese a los problemas de la exportación, llevaron a subidas todavía de la cotización del cerdo durante buena parte de junio en España.